La Campaña de la Sierra es la última y más larga etapa de la Guerra del Pacífico. Su mombre tiene relación con la sierra peruana, ya que desde abril de 1881 hasta junio de 1884, un grupo de batallones chilenos combatió fuertemente en las altas mesetas de la sierra de ese país contra las fuerzas contrarias. Ya bajo la presidencia de Domingo Santa María, y durante tres años y dos meses, los soldados chilenos arriesgaron su vida por el triunfo definitivo de nuestro país; a esta fracción del ejército se le denominó "División de los Batallones Solitarios", quienes combatieron contra las fuerzas reorganizadas del general peruano Andrés Avelino Cáceres.
En la sierra peruana algunas tropas regulares, además de indígenas que se les sumaron, realizaron una fuerte resistencia a la ocupación. En este lugar se desarrollaron algunos enfrentamientos armados, como el Combate de Sangra (26 y 27 de junio de 1881), el de La Concepción (9 y 10 de julio de 1882) y la Batalla de Huamachuco (10 de julio de 1883).
El primer paso del general Cáceres (Campaña de la Breña) fue la guerra de guerrillas, lapso en que ganó tiempo para formar un buen ejército de unos tres mil hombres, ocho piezas de artillería, un regimiento de caballería y el fuerte apoyo de campesinos que terminaron por incorporarse como guerrilleros.
Por lo mismo, el jefe político-militar de Chile, el contraalmirante Patricio Lynch, decidió que mientras no se destruyera totalmente al ejército peruano, no se podía seguir con la lucha hacia la paz. Fue así como Lynch creó la División del Centro, con tres mil hombres, con el único objetivo de conquistar la Sierra Central. En 1882, este ejército -al mando del coronel Gana- logró reducir a las fuerzas peruanas a poco más de mil hombres.
El 1 de febrero de 1882 tomó el mando de las fuerzas chilenas el coronel Estanislao del Canto, comandante del Regimiento Segundo de Línea, mientras las tropas peruanas se reorganizaban para derrotar a la División del Centro, que ya se encontraba en las orillas del río Mantaro, lugar elegido por el general Del Canto como sede del cuartel general.
La idea de Cáceres era encerrar a Del Canto en el valle de Mantaro, dividiendo sus tropas en tres: al mando de los coroneles Juan Gastó y Máximo Tafur, y otra a su cargo.
El 5 de julio, Estanislao del Canto dispuso que la cuarta compañía del Chacabuco, al mando del capitán Ignacio Carrera Pinto, relevara una fracción del mismo regimiento.
En la sierra peruana algunas tropas regulares, además de indígenas que se les sumaron, realizaron una fuerte resistencia a la ocupación. En este lugar se desarrollaron algunos enfrentamientos armados, como el Combate de Sangra (26 y 27 de junio de 1881), el de La Concepción (9 y 10 de julio de 1882) y la Batalla de Huamachuco (10 de julio de 1883).
El primer paso del general Cáceres (Campaña de la Breña) fue la guerra de guerrillas, lapso en que ganó tiempo para formar un buen ejército de unos tres mil hombres, ocho piezas de artillería, un regimiento de caballería y el fuerte apoyo de campesinos que terminaron por incorporarse como guerrilleros.
Por lo mismo, el jefe político-militar de Chile, el contraalmirante Patricio Lynch, decidió que mientras no se destruyera totalmente al ejército peruano, no se podía seguir con la lucha hacia la paz. Fue así como Lynch creó la División del Centro, con tres mil hombres, con el único objetivo de conquistar la Sierra Central. En 1882, este ejército -al mando del coronel Gana- logró reducir a las fuerzas peruanas a poco más de mil hombres.
El 1 de febrero de 1882 tomó el mando de las fuerzas chilenas el coronel Estanislao del Canto, comandante del Regimiento Segundo de Línea, mientras las tropas peruanas se reorganizaban para derrotar a la División del Centro, que ya se encontraba en las orillas del río Mantaro, lugar elegido por el general Del Canto como sede del cuartel general.
La idea de Cáceres era encerrar a Del Canto en el valle de Mantaro, dividiendo sus tropas en tres: al mando de los coroneles Juan Gastó y Máximo Tafur, y otra a su cargo.
El 5 de julio, Estanislao del Canto dispuso que la cuarta compañía del Chacabuco, al mando del capitán Ignacio Carrera Pinto, relevara una fracción del mismo regimiento.
Combate de La Concepción
El Combate de La Concepción es considerado, hasta hoy, como uno de los hechos más dramáticos de la Guerra del Pacífico. Se llevó a cabo los días 9 y 10 de julio de 1882 precisamente en el pueblo peruano de La Concepción. La guarnición completa del regimiento Chacabuco, compuesta por 77 jóvenes al mando del capitán Ignacio Carrera Pinto, resistió durante dos días el ataque de dos mil soldados peruanos, que tuvo como resultado la muerte de todo el contingente chileno.
El 9 de julio a las dos de la tarde comenzó la batalla, en la que cayó un grupo de jóvenes chilenos. Sin embargo, el ejército de Chile derrotó en forma definitiva a las fuerzas peruanas en la Batalla de Huamachuco, luego de la cual se firmó el Tratado de Ancón (1883), por el cual se puso fin a la guerra con Perú. Más tarde se suscribió un pacto de tregua con Bolivia (1884), ya que este país no aceptó firmar un tratado de paz.